Noticias falsas es una instalación multimedia que explora el poder de la desinformación y el miedo que genera en la sociedad contemporánea. La serie consta de seis esculturas de tamaño mediano y tres pinturas de gran formato dispuestas para crear una experiencia inmersiva, las pinturas, dispuestas a lo largo de las paredes, sirven como narrativas visuales fragmentadas, mientras que cinco esculturas se yerguen sobre pedestales, mirando al espectador a la altura de los ojos. La última escultura, suspendida del techo y apoyada contra la pared, perturba el espacio, sugiriendo inestabilidad, colapso y el precario equilibrio entre la verdad y la ficción.

A través de la distorsión, la superposición y la manipulación de materiales, Fake News refleja la naturaleza abrumadora y caótica de los medios modernos. La tensión entre las esculturas y las pinturas refleja las narrativas contradictorias que consumimos a diario. Las sombras y los reflejos desempeñan un papel crucial en la experiencia, distorsionando la percepción y reforzando la sensación de incertidumbre que genera la desinformación.

El dibujo no solo es la base de la expresión visual, sino también una poderosa herramienta para comprender y comunicar ideas complejas. Muchas de estas obras comenzaron como bocetos: traducciones crudas e inmediatas del pensamiento a la forma. El acto de dibujar, ya sea en etapas preparatorias o como marco conceptual, desempeña un papel crucial en la configuración de las composiciones escultóricas y pictóricas finales. Este proceso evoca la idea de que, en un mundo nublado por la desinformación, el acto de ver, trazar y definir se convierte en un acto de recuperación de la claridad.

Esta obra invita al público a cuestionar sus suposiciones, cuestionando las formas en que el miedo se fabrica, se difunde y se internaliza. En un mundo donde las falsedades moldean las realidades, Noticias falsas pregunta: ¿Qué sucede cuando la verdad misma se vuelve subjetiva?

Esta serie no es simplemente una observación de la desinformación; es un recorrido sensorial que coloca al espectador en una posición de duda y cuestionamiento. La fisicalidad de estas obras, los contrastes de textura y materiales, y las distorsiones deliberadas de la percepción, invitan al público a participar activamente. Al navegar por estas contradicciones, se convierten en participantes de los mismos mecanismos de incertidumbre que la obra busca exponer. El objetivo no es solo representar el miedo, sino hacerlo tangible.

A lo largo de la historia, los artistas se han enfrentado a los miedos que definen su tiempo. Esta exposición continúa esa tradición, exponiendo cómo la desinformación, la vigilancia digital y la inestabilidad política moldean nuestra percepción de la realidad. Estas obras no se limitan a representar el miedo, sino que lo disecciona y lo expone, obligándonos a repensar las narrativas que configuran nuestra percepción de la realidad. En un mundo donde la verdad es cada vez más esquiva, el arte se convierte no solo en una reflexión, sino en un acto de resistencia.